jueves, 5 de julio de 2012

Vuelvo con las pilas bien cargadas, con la seguridad de que sé exactamente lo que quiero y que estoy dispuesta a conseguirlo.

Me encanta mi vida, adoro a mis chicos pero es verdad que ahora me doy cuenta que he dejado un poco de lado mi identidad como mujer, me he dejado llevar por la rutina de niños, marido, casa, trabajo, cursos que se había convertido en una cadena rutinaria en la que pasaba el tiempo sin pensar en nada más y he tenido la suerte de poder viajar lejos para volver a encontrarme pero esta vez no como hace años que me podía encontrar con alguna inseguridad, algún miedo, me he sorprendido disfrutando de cada momento, hablando con la gente y saboreando cada instante.

Es duro volver a este trabajo que nada tiene que ver conmigo, pero me siento afortunada de tenerlo y no tener que escoger entre un pollo o la ternera porque no me alcanza y ahora tengo la certeza de que pronto, muy pronto volveré a dedicarme a lo que realmente me gusta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario