lunes, 25 de junio de 2012

Casi tres años...

Hace casi tres años que escribí mi última entrada… Como un final feliz… ¡Cuántas ilusiones! ¡Cuántas esperanzas!...Un nuevo proyecto entre manos… Una nueva vida gestándose en mi interior…




Mi trabajo como mediadora fue una experiencia única. Yo no sabía lo que era levantarse por la mañana con la ilusión de ir a trabajar, de saber que todo lo que puedes aportar era bueno…



Y llegó mi garbancito… No lo esperaba tan pronto pero vino…



Los dos últimos años han sido muy duros… Duro fue el primero porque no me sentía capaz de atender las necesidades de un niño de dos años con otro recién nacido y si le atendía a él tenía que desatender al recién nacido.



Y duro ha sido el segundo, el más duro de mi vida: murió mi madre (y no puedo decir nada más sin romper a llorar). Y después vino una época convulsa de adaptaciones a la nueva situación que poco a poco voy asimilando…



La crisis me devolvió a mi antigua profesión, a la que un día dije adiós para siempre perola vida no siempre nos deja cerrar los ciclos… Por eso, tal vez, es bueno dejar las puertas abiertas.



Y con esta nueva situación hago lo posible por ser feliz porque si yo lo soy mis hijos lo son y ellos son mi prioridad y mi razón de existir y el motivo por el que hago las cosas que hago. Los que me dan el aliento para continuar persiguiendo mis sueños y los que me dicen que cada día están más cerca…

No hay comentarios:

Publicar un comentario